Por
Lic. Arnaldo Calvo Buides
¿Usted cree que para un atleta sea lo más sensato
participar en un torneo equis, el cual finaliza justamente 3 días antes del
inicio de la competencia fundamental (Campeonato Nacional), en vez de rehusar
asistir al torneo equis para aprovechar y pulir sus líneas y otros detalles con
vistas al magno evento del país?
Pues del 4 al 8 de febrero la ciudad de Los
Ángeles (VIII Región), Chile, acogerá una versión más del Campeonato Nacional
de Ajedrez de Menores y precisamente hoy estará finalizando el torneo
internacional de Doñihue, donde hay atletas que estarán presentes en Los
Ángeles.
Habría que preguntarse si quienes intervienen en
Doñihue y luego saldrán hacia Los Ángeles poseen, digamos, sus repertorios de aperturas de manera
impecable, por solo poner un ejemplo. De no ser así, mi consideración personal
es que debieron haber reemplazado el torneo de Doñihue por un estudio
profundizado de sus aperturas y demás.
Hay quienes llegarán al próximo Campeonato Nacional
con un montón de torneos jugados, muchas partidas, pero con un montón de
problemas por solucionar en sus juegos. Y es que juegan, y juegan, pero apenas
pulen sus aperturas y analizan sus partidas. Días recientes comentaba que era preferible
jugar 20 torneos al año y analizar debidamente las partidas, que jugar 40 y apenas ¨revivir ¨ los encuentros.
Y es que el análisis correcto de una partida es una clase de ajedrez.
El buen entrenador, en el macrociclo de
entrenamiento, teniendo como referencia la competencia fundamental, determina en
cuáles torneos participarían sus atletas, y trabajaría porque llegado el magno
evento sus atletas muestren la menor cantidad de fisuras técnicas –teóricas en
sus juegos. No solo se trata de jugar, y jugar…
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