Por Lic. Arnaldo Calvo Buides
Apenas finalicé la sesión de entrenamiento en el Club de ajedrez CEPA (Centro de Estudios y Prácticas de Ajedrez), de Viña del Mar, y me aguardaba una gran sorpresa.
¨Arnaldo, con motivo de las festividades que se avecinan, y por formar parte del Club, queremos hacerte este obsequio...¨, de manera ceremoniosa dijo Paola, quien junto a su esposo Manuel Aguirre son unos de los representantes de CEPA.
El presente venía en una linda envoltura. Me la iba extender ella personalmente, pero prefirió que lo hiciese un atleta: Maximiliano Ruiz, de 10 años, quien recientemente participó en el campeonato Sudamericano de la Juventud de Ajedrez, en Cochabamba, Bolivia.
¨Queremos que lo abras ahora…¨, insistió Paola, una vez que yo tenía el obsequio en mis manos. Y, eso hice, claro está. ¿Qué será?, me preguntaba mientras tanto….
¡Una polera del Club CEPA!. Tamaña sorpresa, no lo esperaba. Me emocioné, e inevitablemente tuve que decir unas palabras.
¨Ante todo muchísimas gracias por el presente…Y no quiero que lo vean como una retórica de mi parte, pero el mejor regalo que me pueden hacer ustedes es que progresen, que tengan buenos resultados, que en un futuro lleguen a ser Grandes Maestros…, lo que hace falta que en ese momento no se olviden de mí, del entrenador cubano que en un momento los entrenó¨, les dije de manera jocosa esto último a los atletas presentes.
Y no faltó la broma con Manuel. Al posar para una foto mostrando la polera, le expresé que tal parecía que me habían contratado para el equipo de fútbol español Barcelona, teniendo en cuenta que en el mundo futbolístico es habitual que se proceda de igual manera al ingresar a un nuevo club.
Una vez más, aprovecho este espacio para agradecer por el obsequio. Para mí representa muchísimo, pues justamente fue CEPA el que me abrió las puertas en Chile, que me dio la OPORTUNIDAD de transmitir mis conocimientos y guiar a talentosos atletas, quienes me hacen confirmar que el mejor regalo está por llegar.
Apenas finalicé la sesión de entrenamiento en el Club de ajedrez CEPA (Centro de Estudios y Prácticas de Ajedrez), de Viña del Mar, y me aguardaba una gran sorpresa.
¨Arnaldo, con motivo de las festividades que se avecinan, y por formar parte del Club, queremos hacerte este obsequio...¨, de manera ceremoniosa dijo Paola, quien junto a su esposo Manuel Aguirre son unos de los representantes de CEPA.
El presente venía en una linda envoltura. Me la iba extender ella personalmente, pero prefirió que lo hiciese un atleta: Maximiliano Ruiz, de 10 años, quien recientemente participó en el campeonato Sudamericano de la Juventud de Ajedrez, en Cochabamba, Bolivia.
¨Queremos que lo abras ahora…¨, insistió Paola, una vez que yo tenía el obsequio en mis manos. Y, eso hice, claro está. ¿Qué será?, me preguntaba mientras tanto….
¡Una polera del Club CEPA!. Tamaña sorpresa, no lo esperaba. Me emocioné, e inevitablemente tuve que decir unas palabras.
¨Ante todo muchísimas gracias por el presente…Y no quiero que lo vean como una retórica de mi parte, pero el mejor regalo que me pueden hacer ustedes es que progresen, que tengan buenos resultados, que en un futuro lleguen a ser Grandes Maestros…, lo que hace falta que en ese momento no se olviden de mí, del entrenador cubano que en un momento los entrenó¨, les dije de manera jocosa esto último a los atletas presentes.
Y no faltó la broma con Manuel. Al posar para una foto mostrando la polera, le expresé que tal parecía que me habían contratado para el equipo de fútbol español Barcelona, teniendo en cuenta que en el mundo futbolístico es habitual que se proceda de igual manera al ingresar a un nuevo club.
Una vez más, aprovecho este espacio para agradecer por el obsequio. Para mí representa muchísimo, pues justamente fue CEPA el que me abrió las puertas en Chile, que me dio la OPORTUNIDAD de transmitir mis conocimientos y guiar a talentosos atletas, quienes me hacen confirmar que el mejor regalo está por llegar.
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