THALÍA AMA EL AJEDREZ

 Por Lic. Arnaldo Calvo Buides

Acabo de conocer más a fondo sobre Thalía Cervantes Landeiro, de la nueva hornada de ajedrecistas cubanas. Mediante una entrevista que concediese a la Revista Bohemia, supe que próximo a cumplir los 7 años fue que  se motivó por el juego ciencia y la mamá la lleva al Instituto Latinoamericano de Ajedrez (ISLA), en La Habana, de donde es oriunda.

Multimedallista en torneos nacionales, en diciembre pasado intervino en el Festival Centroamericano en Costa Rica, donde en un grupo mixto Sub-12, obtuvo  el oro entre las féminas, con destaque por las tablas con el campeón centroamericano masculino, Eduardo Millar, de Honduras.

Al preguntarle de cómo es  su vida común, esto fue lo que dijo Thalía a Bohemia:

¨Asisto a la escuela, luego entreno de 2 de la tarde a siete de la noche con el GM Walter Arencibia. Cuando terminan sus clases aprovecho para divertirme con mis compañeros jugando partidas rápidas y riéndonos cantidad mientras disfrutamos. Regreso a mi casa, hago las tareas de la escuela y a descansar para el otro día.
Realizo preparación física tres veces a la semana asistiendo a un gimnasio. El sábado entreno con otros jugadores, asisto al ISLA o participo en algún torneo de partidas rápidas. Los domingos descanso, pero reviso y hago alguna tarea del ajedrez, juego partidas por diversión con amigos ajedrecistas y dedico algún tiempo a leer.¨

Sobre Thalía, opinó su entrenador, GM Walter Arencibia:
“En Thalía se resumen todas las condiciones para convertirse en una gran jugadora: responsabilidad, dedicación, y los más importante: un infinito amor por el ajedrez”.